jueves, 19 de agosto de 2010

Jimi Hendrix castle made of sand / español / spanish

Por la calle puedes escucharla gritar que tu eres una desgracia
y mientras ella tira la puerta frente a su cara emborrachada
el se queda parado afuera
y todos los vecinos comienzan a chismosear
El llora y le dice !oh mi vida debes estar muy molesta!
¿Que paso con aquel dulce amor que tu y yo teníamos?
Y frente a la puerta el se arrodilla y comienza hacer una escena
y sus lagrimas caen y queman el verde jardin.

Entonces los castillos hechos de arena caen en el mar, eventualmente.

Un pequeño y bravo indio, quien, antes de cumplir diez
jugaba juegos de guerra en los bosques indios con sus amigos indios y construyo un sueño en el cual cuando el creciera se convertiría en un JEFE INDIO.
Muchas lunas han pasado y aquel sueño creció mas fuerte y hasta mañana el iba a a cantar su primera canción de guerra y iba a pelear su primera batalla, pero , algo salió mal, !un ataque sorpresa lo mato mientras dormía tranquilo en la noche!

Entonces los castillos hechos de arena se funden en el mar, eventualmente

Habia una niñita, que tenia el corazón acongojado
porque estaba invalida de por vida
y tampoco podía decir un sonido (era muda)
y ella deseaba y oraba que Dios le quitara la vida
entonces decidió morir.
Llevo su silla de ruedas al borde del acantilado
y le sonrío a sus pierna y les dijo ya no me harán mas daño(sus piernas), Pero, entonces una vista que nunca havia experimentado la hizo saltar de su silla (SE PARO!) y dijo:
Mira! hay un barco con alas de oro pasando frente a mi! (HABLO!) y realmente no tiene que detenerse, solo se mantiene andando….

Entonces los castillos hechos de arena se deslizan sobre el mar , eventualmente

Traducción y anotaciones: Ramses Objio

Rubén Darío A Phocás, el campesino

Phocás el campesino, hijo mío, que tienes
en apenas escasos meses de vida, tantos
dolores en tus ojos que esperan tantos llantos
por el fatal pensar que revelan tus sienes...

Tarda a venir a este dolor adonde vienes,
a este mundo terrible en duelos y en espantos;
duerme bajo los Ángeles, sueña bajo los Santos,
que ya tendrás la Vida para que te envenenes...

Sueña, hijo mío, todavía, y cuando crezcas,
perdóname el fatal don de darte la vida
que yo hubiera querido de azul y rosas frescas;

pues tú eres la crisálida de mi alma entristecida,
y te he de ver, en medio del triunfo que merezcas
renovando el fulgor de mi psique abolida.